lunes, 16 de abril de 2012

Desastre económico y ambiental en Paraguay

Foto gentileza Ramón Maíz y Vanesa Farías 
La pareja Ramón Maíz y Vanesa Farías auxiliaron con su lancha a motor a las familias de Agropil y sacaron fotos las cuales compartieron con nosotros.
En Paraguay se conoce como "Agropil" a la zona comprendida entre los parajes La Señora, Palo Cruz y Linares.  
En ese sector de la cuenca, son 26 familias de las cuales 23 abandonaron sus casas por el agua. Ellos suelen convivir con el agua todos los años, retirándose a lugares altos en "campamentos" y proveyéndose de mercaderías para un mes. Después de un mes, el agua solía bajar.
Todo bajo el agua
Foto gentileza Ramón Maíz y Vanesa Farías

Pero ahora ya van 4 meses y la situación se ha comenzado a complicar. Los animales encerrados en lugares altos se vuelven flacos, se enferman y muchos mueren, poniendo a riesgo toda la economía ganadera de la región y transformando en altamente vulnerables a pueblos cuya soberanía alimentaria estaba garantizada por sus propias actividades productivas.  Desde las diferentes instancias de gobierno se podrá garantizar cierta seguridad alimentaria, con el aporte de mercaderías y subsidios; sin embargo, recuperar la capacidad propia de producir alimentos requerirá de un esfuerzo mucho mayor y de una "lógica de ayuda" que atienda debidamente a las realidades culturales y ambientales de la zona.
Pobladores de Fortín Linares abandonando sus casas
Foto gentileza Ramón Maíz y Vanesa Farías
 
Cuenta Ramón Maiz que en lo que es "Agropil" hay cerca de 4 taponamientos que embalsan el agua y provocan mayores desplazamientos del bañado hacia atrás.  Esto se conocía ya antes de que venga el agua y se comunicó a las autoridades correspondientes. Él no entiende por qué no se los sacó de ahí. 
Aguas arriba, en la zona conocida como "Tuscal" (Tuscal es la parte criolla de Mistolar) la situación es tan dramática como esta.

Las intensas lluvias de la semana pasada incrementaron el riesgo en la zona, provocando desbordes por crecientes locales.  A esto se sumará, esta semana, el ingreso de la creciente registrada durante el fin de semana en Misión La Paz, con importantes volúmenes de agua.  Una situación inédita en la historia hidrológica del Pilcomayo de los últimos sesenta años (desde que se cuenta con registros regulares).

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